Los análisis parciales dan hoy por ganador a Line porque es la aplicación más descargada en los smartphones. Sin embargo, una cosa es que esté instalada en el terminal y otra que se utilice con la misma frecuencia que Whatsapp. En este sentido, existe un hecho objetivo: Whatsapp es el rey para asuntos de trabajo y clave para las relaciones personales. Al menos, por ahora.
Pero Line ha hecho trampas para conseguir con éxito que se hable de la aplicación y que tenga un alto índice de penetración entre los smartphones (que no es poco). Line empezó por el buen camino: el boca a boca. Pero para mí, personalmente, me ha dejado de molar cuando ha recurrido a la televisión tradicional con un spot casposo para darse a conocer entre los nichos que más tardan en adoptar la tecnología (no nos olvidemos que el espectador de televisión es más adulto que el usuario de redes sociales):
El anuncio es antiguo, rancio y está lleno de topicazos. Line ataca en un contexto en el que Whatsapp anuncia el cobro de 0,89 miserables céntimos de euro al año para mantener el servicio en Android e iOS. Hoy debatía con un amigo hasta cuánto dinero estaríamos dispuestos a pagar para mantener Whatsapp en nuestras vidas: 5 euros al año nos parecía justo.
Whatsapp promete mejorar su app para responder a sus competidores. Pero sólo el tiempo confirmará si el fin de Whatsapp llegará con Line, Yuilop, Spotbros o whatever!
No me caso con nadie.
Jorge Gallardo 